Arturo Sastré participó en el Tren de Entrevistas #JuntosALas9DeLaMañana, que se transmite en vivo por RevistaPantalla vía FB y YouTube. Pone el dedo en la llaga al decir lo siguiente: tanto Imcine como la Secretaría de Cultura deberían de contar con un Departamento de Mercadotecnia, pero eso no lo han visto como algo importante, solo de forma excepcional han puesto el foco en la posibilidad de vender los productos sensibles, que son los creados por artistas.
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José Antonio Fernández: ¿Qué deben saber sobre el poder de la mercadotecnia todos los creativos, los artistas, quienes se dedican a la producción de cine, series, telenovelas, cortos y documentales? Arturo Sastré: A las creaciones artísticas nosotros les hemos dado el nombre de productos sensibles, que se producen siempre en baja escalabilidad. Los artistas hacen realidad productos unitarios: un cuadro, una escultura, una serie, una telenovela, una película, un corto, un documental.
Te doy un ejemplo: en el caso de una película, aunque se proyecte en salas de cine, tiene baja escala porque su vida en el anaquel, en el exhibidor, es muy corta. Lo que no sucede con los clásicos productos comerciales que siempre están en el súper a disposición del comprador, que se producen en serie. Por esto los productos sensibles deben dar la mayor importancia a la mercadotecnia y también a la administración, siempre tomando en cuenta que los mercados hacen un uso demasiado aleatorio a los productos sensibles, esto todavía complica más la vida para los profesionales que se dedican a la profesión artística.
José Antonio Fernández: ¿Qué diferencia hay entre los productos sensibles y los productos comerciales que se producen en serie? Arturo Sastré: Los productos sensibles están hechos por un autor, no así los productos comerciales producidos en serie.
El artista, por definición del derecho de autor, es inseparable de su obra. Un producto sensible nunca se separa de su autor. Quien compra un producto sensible se hace dueño del derecho de tenerlo, pero el autor sigue siendo dueño de su obra.
José Antonio Fernández: Cuando a un artista se le dice que necesita hacer mercadotecnia para vender sus productos sensibles, no es remoto que se ofenda. La idea de que la mercadotecnia y la publicidad es mentir, está muy difundida. Arturo Sastré: Quien piensa que la mercadotecnia y la publicidad se dedican a mentir, está absolutamente equivocado. La mercadotecnia estudia de forma muy seria los mercados, por su parte la publicidad busca la promoción de un producto en esos mercados en los que tiene oportunidad de venderse. Todo este trabajo se hace con base en desarrollar productos que cuenten con cualidades para su venta.
La mercadotecnia establece finitudes, tamaños del mercado.
Todas las grandes empresas hacen estudios de mercadotecnia, de otra forma no sabrían hacia dónde caminar y qué tanto espacio ocupan en un mercado