Rafael Lugo es periodista y Director de Canal Once. Le ha inyectado a la estación del Poli una energía mayor en este final de sexenio.
Imagino que todas las mañanas se dice a sí mismo, frente al espejo: "nada de frenar al Once, se trata de acelerar porque esta carrera por la audiencia y de ir por todos
los públicos se puso ya muy emocionante. ¡Muy!"
En los sesentas, ochentas y hasta los ochentas, al Canal Once le acompañó una frase cruel que marcaba su presente y destino: decían que era el canal del crimen
perfecto. Explico la frase: como se decía que nadie lo veía, al aire en su pantalla era posible cometer un crimen y no ser visto por nadie.
Esa frase cruel tenía una intención mayor: descalificar a priori a Canal Once y a todos los que ahí aparecían. Eran la mayoría disidentes que criticaban al sistema y querían otro país.
Lo cierto es que Canal Once no cosechó grandes audiencias durante tres décadas y no causó mayor impacto entre el gran público a lo largo de esos más de treinta años, porque simplemente su transmisor no servía. Yo puedo asegurar hoy que así se planeó políticamente. Como en el Once del Poli se cuestionaba al gobierno, sencillamente el gobierno no le invertía a lo más importante: el transmisor.
Soy testigo de que en 1989, el entonces director de Imevisión, José Antonio Álvarez Lima, quien en algún momento fue Director de Noticias del Once, se las arregló para "regalar" un transmisor al Once que sí permitiera ver el canal del Poli. De un golpe dejó de ser el canal del crimen perfecto. Ese transmisor fue sustituido hace apenas un año. Su entonces directora, Alejandra Lajous, supo darle al Once un aire de elegancia y modernidad a partir de los noventas y lo posicionó como un buen canal de televisión.
Marcó el antes y después. Lo aligeró también.
Después llegó Julio Di-Bella a la dirección en el sexenio de Vicente Fox y se atrevió a producir y colocar las series propias sin recato alguno en los mejores horarios. Su mayor éxito: El Diván de Valentina.
De relevo en el sexenio de Felipe Calderón, entró el cineasta Fernando Sariñana como Director y le dio el impulso definitivo para modernizarlo. Se lanzó a producir con más variedad y con más series de ficción hechas para sumar gran público.
Y hoy como Director está el periodista Rafael Lugo, quien le imprime un definitivo sello característico mayor con toda claridad: Canal Once va hoy a todos los públicos decidido a competir por la audiencia en todos los horarios.
José Antonio Fernández: ¿Qué significa para tí ser Director de Canal Once?
Rafael Lugo: Creo que no hay estudiante de Comunicación ni personaje que trabaje en este medio, que no haya soñado con ser director de un canal de televisión. Para mí es un privilegio enorme, un orgullo, se padece poco, es un placer y lo disfruto mucho.
Como Director de Canal Once se pueden realizar muchas cosas muy interesantes con una gran conciencia social, pertinentes, y un manejo eficiente de recursos.
¡Es una maravilla Canal Once desde todos los puntos de vista!
José Antonio Fernández: Entiendo que además para tí Canal Once tiene un significado especial, porque tú ya estabas aquí cuando te hiciste director.
Rafael Lugo: En 53 años que tiene Canal Once, es la primera ocasión que llega una persona a la dirección que surge de las filas del propio Canal. No hablo
de interinos.
Yo fui antes Director de Noticias en Canal Once durante siete años y medio.
Tengo la experiencia de haber trabajado con dos directores que aportaron al Canal muchísimo: Julio Di-Bella, quien me invitó a la estación, y Fernando Sariñana, que revolucionó la pantalla del Canal en cuanto contenido y competencia con las cadenas de televisión abierta.
Crecer Canal Once y hacerlo llegar a muchas más ciudades del país es un proyecto de esta administración de Felipe Calderón y de Fernando Sariñana. Esta etapa de
crecimiento franco inició hace tres años.
Canal Once dejó ya de ser una televisora chilanga.
Hoy por hoy, Canal Once es la televisora pública más importante del país y una de las más relevantes de América Latina, sin duda, sino es que la más.
Nuestro presupuesto hoy nos permite competir.
Dirigir Canal Once es el compromiso más grande que he tenido, una enorme responsabilidad como servidor público y también como gente de medios.
José Antonio Fernández: ¿Cuál era y cuál es el presupuesto del Once?
Rafael Lugo: El presupuesto anterior nos permitía producir y también adquirir materiales del extranjero, subrayando que nuestra programación siempre ha mantenido una dinámica alternativa e interesante.
Desde hace tres años nuestro presupuesto creció casi al triple, lo que nos abrió la puerta para hacer alianzas con casas productoras de alto prestigio y adquirir programas en el extranjero que antes sólo los veíamos pasar.
Hoy nuestro presupuesto anual es de 637 millones de pesos.
El resultado es que hoy sí nos mostramos como lo que queremos ser. Ahora hay mucha gente que quiere trabajar en el Canal.
El Once siempre ha sido un semillero para la televisión mexicana, tanto en el área de ingeniería como de producción. Eso se sigue dando.
Hoy se acercan con nosotros actores y actrices, el star-system, y no te hablo de que vengan al Once a echarse un palomazo. Quieren estar en el Once para hacer eso que siempre tuvieron en mente y que aquí sí pueden producir. No buscan el dinero, sino realizar sus sueños.
José Antonio Fernández: Por lo que me dices, ese star-system se siente a gusto aquí en Canal Once.
Rafael Lugo: Eso es lo que me dicen, que les gusta trabajar con nosotros. Se sienten libres.
José Antonio Fernández: 637 millones de pesos al año es sin duda una muy buena cantidad, pero en este negocio de la televisión no hay dinero que alcance.
Si mañana le pagan a ciertos artistas las cantidades que acostumbran cobrar, ese dinero se puede esfumar en un instante.
Rafael Lugo: Justamente en Canal Once no debemos perder nuestra misión y nuestros objetivos.
Nosotros no debemos pretender pagar para estar en el star-system, ahí no tenemos nada que hacer.
Nos equivocaríamos al ir por ese camino.
Nosotros debemos producir bajo los parámetros de nuestros presupuestos, buscar nuevos talentos para seguir siendo un semillero y también invitar a grandes creativos, directores, actores y actrices que pertenecen al star-system, pero que quieran trabajar dentro de nuestros presupuestos. En unos minutos voy a tener una reunión con Michael Rowe, ganador del Festival de Cannes. Fue Rowe quien nos buscó, no nosotros. Por supuesto, para el Once sería una maravilla llegar a algún acuerdo de producción.
José Antonio Fernández: Doy un dato: una telenovela puede costar alrededor de 15 millones de dólares. Significa que con el dinero que Televisa produce tres telenovelas, Canal Once produce y opera todo el año.
Queda claro que el Once debe gastar de forma distinta el dinero.
Rafael Lugo: Es complejo nuestro presupuesto porque debemos llegar a todos los públicos de distintas maneras.
Atendemos a los jóvenes, aunque los mercadólogos insisten que los jóvenes no están en la tele. Algo importante a tomar en cuenta, es que hoy como canal de televisión competimos con todos los medios, especialmente con internet que ya no es un medio menor. Debemos tener proyectos y producciones también en línea. Contamos con un portal especial de noticias.
Las series de ficción son las que nos cuestan más, pero han sido la ventana para sumar público.
Por supuesto, no olvidamos que siempre estamos obligados a invertir para modernizarnos tecnológicamente todo el tiempo.
Queremos hoy más presupuesto porque queremos hacer más.
Seguimos adquiriendo programas que consideramos más interesantes a nivel mundial.
Compramos series que tienen gran fama en el planeta. Queremos proyectar El encantador de Perros.
Continuamos produciendo programas que sabemos no nos dan altos ratings, pero que sí debemos transmitir porque son parte muy importante de nuestra
motivación y naturaleza, como Primer Plano (Los hombres de negro), Espiral, Dinero y Poder, Agenda a fondo y Diálogos.
José Antonio Fernández: Hoy los programas de producción propia han ganado ya de manera definitiva los mejores horarios en el Once.
¿Cuáles son los criterios para programar Canal Once?
Rafael Lugo: Utilizamos el método de la contraprogramación.
Si Televisa y Azteca están con telenovelas, nosotros vamos con noticieros. Cuando ellos van con sus noticias, nosotros programamos nuestras series y películas. En nuestro horario de 7 a 9 quitamos todos los cortes.
Te puedo decir que nuestros programas de producción propia alcanzan los mismos ratings que cuando colocamos programas
de BBC.
José Antonio Fernández: ¿Canal Once programa viendo el rating?
Rafael Lugo: Definitivamente, no.
Al programar, en Canal Once pensamos en la pertinencia, en nuestro prestigio, que es respetar nuestra personalidad, y por supuesto, en darle un valor de contenido al televidente.
Si nos rigiéramos por el rating, a lo mejor compraríamos, y lo digo respetuosamente, telenovelas venezolanas con las que podríamos alcanzar más altos niveles de rating. Están a disposición en el mercado.
Nuestra ecuación es diferente. Lo mejor que nos puede suceder es alcanzar los mayores ratings con los programas que tengan mejor fondo y forma.
Si las demás televisoras hicieran televisión con estos objetivos, viviríamos el mundo ideal, no es así.
Hoy sabemos que la gente busca una televisión que le deje algo más que sólo entretenimiento.
José Antonio Fernández: Cuéntame de los niveles de rating de Canal Once. ¿Me puedes dar algún ejemplo?
Rafael Lugo: La serie Soy tu fan, producida por Canal Once, ha alcanzado niveles de audiencia altísimos, 7 puntos, que es el mismo rating que tiene el noticiero de Televisa por las mañanas.
El Noticiario del Once de cinco y media a las siete de la mañana, tiene un share del 25 por ciento, uno de cuatro televisores encendidos nos está viendo todas las mañanas.
Nuestro noticiario de la noche tiene 3 puntos de rating. Sabemos que alcanza los niveles más altos en la encuesta nacional de medios y también en la encuesta anual de la Revista Telemundo y Canal100.com.mx.
José Antonio Fernández: Lo reconfirmo, en la encuesta anual de la Revista Telemundo y Canal100.com.mx la conductora Adriana Pérez Cañedo del Once siempre se ubica entre los 4 conductores de noticias con más alta credibilidad.
En ocasiones ha ocupado el primer lugar.
Te pregunto: ¿tú decidiste el hacer que Canal Once fuera a todos los públicos, no sólo para niños ni para gente mayor, sino a todos?
Ir a todos abre un horizonte gigantesco.
Hay otros tres canales en México que son para todos: el 2 y 9 de Televisa y Azteca 13. Y también podría sumar el 5.
Rafael Lugo: Cuando empezamos a producir series hace tres años, llegamos a perder televidentes porque se sentían más cómodos con una programación que llegaba más a gente mayor.
Me parece que esta apertura a toda la audiencia es un trabajo de diez o quince años, incluyo a las administraciones de Alejandra Lajous, Julio Di-Bella y Fernando Sariñana. Ahora que yo estoy al frente continuamos por el mismo camino.
Te platico algo muy importante: cuando antes hacíamos encuestas, la gente siempre nos decía que quería ver más cultura y más documentales en televisión. Teníamos cultura y documentales, nosotros los programábamos pero sabíamos que se veían poco. Hoy nuestra presencia con el público es mayor, quieren ver mejor programación y ahora sí sabemos que nos están viendo.
José Antonio Fernández: Yo extraño la actitud contestataria que tuvo el Canal Once en los setentas y ochentas, con personajes como Luis Carbajo, Sergio Romano, Tomás Mojarro y Jimmy Fortson, quien sé interpuso una demanda contra Alejandra Lajous por ser despedido del canal del Poli.
A mí me falta todavía ese ingrediente rebelde en la programación de Canal Once, con programas como Trizas en Trazos y Teatro en Atril.
Rafael Lugo: Creo que tenemos ese espíritu también hoy.
Soy televidente del Once desde los 6 años.
Me desvelaba viendo a Luis Carbajo.
Pienso que tenemos programas también contestatarios, y te pongo como ejemplo Primer Plano.
José Antonio Fernández: Acepto que sí hay espacios que mantienen el espíritu contestatario, pero la generación de Carbajo lo hacía de forma jocosa, y eso le daba un tono completamente diferente.
Rafael Lugo: México ha cambiado y las condiciones políticas son diferentes.
Sinceramente te digo que la condición crítica del Once prevalece en nuestra programación. Sí está.
Quizá esa forma jocosa, más desenfadada, como la de Tomás Mojarro invitando a los valedores a salir del subdesarrollo, yo también la extraño aunque considero que no es una televisión que mucha gente quiera ver ahora.
Hoy el público aspira a ver producciones muy llamativas, más entretenidas.
Seguimos produciendo series de alto contenido. Te doy ejemplos: el documental sobre Miguel Ángel Granados Chapa, realizado por Virgilio Caballero, quien también fue Director de Noticias de la estación.
El programa de Pepe Buendía, Agenda a Fondo, toca puros temas candentes, pero lo hace con los mecanismos de regulación de un canal público como lo es el Once, en el que existe un Defensor del Televidente.
Hoy se pone más énfasis en cuidar equilibrios, pluralidad y diversidad de los contenidos.
De la época que tú me hablas, había más chabacanería, se daba la posibilidad de que fueran más espontáneos.
Hoy Canal Once está orientado a la mayoría de los mexicanos. Los televidentes saben que es una pantalla que se produce con los impuestos, por lo tanto que cuesta dinero a los ciudadanos.
Queremos que quienes nos vean se sientan orgullosos del Once, que al fin de cuenta sí es su canal.
Hoy se vale disentir de lo que hacemos en Canal Once, hay mecanismos creados por nosotros mismos para expresar la inconformidad. Esos comentarios que nos llegan sí influyen en serio para la producción y adquisiciónde los programas a futuro y también para realizar cambios, mejoras o incluir
novedades en nuestra programación.
Subrayo que todas nuestras producciones están hechas con un sentido de responsabilidad.
Pasan por focus group.
José Antonio Fernández: Cuando dejó Fernando Sariñana el puesto de Director de Canal Once y entraste tú, muchos pudieran haber pensado que el cambio produciría sólo un trámite para terminar el sexenio. Sin embargo no fue así.
Entras como Director y metes más el acelerador. Veo un Canal más activo, con más lanzamientos, siempre respetando los programas que ya tienen.
Has abierto en estos meses más la pantalla del Canal del Poli, lo veo más diverso e incluso con intenciones más divertidas.
Dime en qué momento tomaste estas decisiones para que se dé lo que estoy diciendo.
Rafael Lugo: Lo que me dices es música para mis oídos.
Te respondo así: las...
MÁS RESPUESTAS DE RAFAEL LUGO: AFIRMA QUE
EL DIVÁN DE VALENTINA ROMPIÓ MITOS
EN CANAL ONCE
• Cuando Canal Once no había entrado a la competencia por el público,
pensábamos que éramos los reyes... que hacíamos siempre las cosas bien. • Hoy que participamos muy activamente para buscar más audiencia y que asistimos a mercados para vender nuestras producciones a otras cadenas del mundo, nos hemos dado cuenta que debemos producir con un sentido global. • Canal Once, el que alguien pudo haber pensado en algún momento que era el canal más aburrido de la televisión mexicana, le vende a la cadena
norteamericana MTV la que se ha convertido en su serie más exitosa:
Soy tu fan. Todo un éxito. • En Canal 11 debemos seguir rompiendo paradigmas. • Nuestra serie Soy tu fan va en su segunda temporada. Llevamos 26
capítulos en dos temporadas. Cada temporada ha costado aproximadamente 30 millones de pesos. • Como bien dices, El Diván de Valentina sí ha influido de forma
determinante en el Once. Es la mamá de la modernidad del Canal Once. Es un parteaguas. Rompió la idea de que no se podía producir ficción bien y de forma atractiva en la estación. Creo que costó 3 millones de pesos la primera temporada con 13 capítulos, es lo que hoy nos cuesta un capítulo de las
nuevas series. En son de broma digo que estamos a punto de develar la placa de las mil representaciones de El Diván de Valentina. Siempre que la
programamos es un éxito de audiencia. No debimos dejarla de producir. • Hoy estamos volviendo a producir La Ruta del Sabor, uno de los programas estelares del Once con Miguel Conde y Carlos Prieto. • También destaco otras series propias producidas antes, como Futboleros
y Fonda su Silla, impulsadas por Patricia Arriaga. El Once también es un laboratorio en donde se vale experimentar.
José Antonio Fernández: El puesto de Director de Canal Once finalmente
también tiene carácter político. El Presidente en turno te puede dar las gracias e invitar a otra persona al puesto. ¿Te convertiste ya en un político, qué harás en este cambio de sexenio en el que de una u otra forma se darán cambios?
Rafael Lugo: Yo no me puedo convertir en político porque no tengo ninguna militancia. Sí tengo ideología, pero en este momento
eventualmente no coincide con la de los partidos.
Yo no trabajo pensando que el primero de diciembre debo entregar la dirección a otra persona, yo simplemente estoy trabajando todos los días. Obviamente como padre de familia me preocupa la condición laboral. Hago lo de siempre: trabajar mucho y bien.
Estaré muy contento si en el Canal sigo yo o si llega otra persona
que lo lleve también por una senda de crecimiento y de continuar
desmitificando esa mala idea de vernos como un canal pequeño que no puede competir por el público. En el Once sí podemos competir y somos un gran canal de televisión pública.
Siga la conversación de José Antonio Fernández Fernández
con Rafael Lugo en el siguiente video,
publicado en exclusiva por Canal100.com.mx